Dark Gathering – Episodio 10

Keitarou Gentouga es un estudiante universitario que odia a los fantasmas. Desafortunadamente para él, tiene un don para atraer a los espíritus. Hace dos años, esta conexión lo llevó a recibir una lesión espiritual en su mano derecha, con su amigo atrapado en el fuego cruzado. El evento lo llevó a convertirse en un recluso, dejándolo con habilidades sociales muy pobres. Afortunadamente, Keitarou está empezando lentamente a mezclarse con la sociedad, gracias a la ayuda de su amiga de la infancia, Eiko Houzuki. Como parte de su rehabilitación, Keitarou asume el trabajo de tutor privado a tiempo parcial, y su primer alumno es nada más y nada menos que la prima de Eiko, Yayoi Houzuki. Además de ser una niña prodigio, hay otra peculiaridad en Yayoi: tiene una constitución espiritual, al igual que Keitarou. Sin embargo, a diferencia de Keitarou, ella anhela encontrar espíritus, esperando encontrar al fantasma que se llevó a su madre. Mientras Yayoi y Eiko arrastran a Keitarou a lugares embrujados, su trabajo a tiempo parcial parece alejarse cada vez más de su propósito original.